La decisión de Donald Trump de imponer aranceles como represalia a la causa que investiga el rol de Jair Bolsonaro en el intento de golpe contra Lula abrió un escenario de debate interno en la Corte Suprema de Brasil.
Fuentes cercanas a la causa reconocen a LPO los jueces del máximo tribunal y en especial Alexander De Moraes estaría evaluando ordenar la detención de Bolsonaro por el intento de fuga. «No lo descartas», respondieron ante la consulta de este medio. El gobierno de Lula también está al tanto de esta posibilidad pero aclaran que no es algo que prefieran en este momento de tensión con Trump.
Las alarmas se encendieron no por la jugada de Trump por un supuesto pedido del gobernador de San Pablo, Tarcisio Gomes da Freitas, para que la justicie autorice el viaje de Bolsonaro a Estados Unidos para negociar personalmente con Trump y capitalizar un eventual levantamiento de los aranceles.
Como adelantó LPO con fuente cercanas a la situación, «no hay clima político en el STF para hacer un acuerdo con la pistola de Trump en su cabeza». Sobre esta base, la lectura de Moraes y buena parte de los jueces supremos es que el bolsonarismo busca una intervención de Trump para revertir la situación judicial o forzar una fuga para instalarse en Estados Unidos como perseguido político.
Las tres opciones que maneja Lula en la pelea con Trump
«Trump ya amenazó a De Moraes con sancionarlo si avanzaba la causa. Ahora interviene directamente con aranceles. Va a lograr el efecto contrario al que buscan», detalla una fuente que sigue de cerca la causa.
LPO adelantó en diciembre que Bolsonaro cree que terminará preso y gestiona el asilo en una embajada que podría ser Estados Unidos o Hungría ante una condena que llegaría durante este segundo semestre.
Bolsonaro creyó poder llegar a un acuerdo con De Moraes por una amnistía para «empezar el juego de cero y pacificar» pero eso nunca ocurrió. Por eso, la otra opción fue apostar a la presión de Donald Trump a la justicia o al Congreso para inclinar la mayoría en favor de la amnistía pero esa posibilidad parece alejarse.
Bolsonaro cree que terminará preso y gestiona el asilo en una embajada
Ya existe un antecedente de Bolsonaro buscando refugio en la embajada de Hungría en marzo de este año cuando la Policía Federal detuvo a varios de los investigados por el intento de golpe.
La información la reveló el NY Times y confirma que el ex presidente estuvo del 12 al 14 de febrero para evitar una eventual detención. Por este motivo, la Corte Suprema estuvo a nada de ponerle tobillera electrónica y ordenar la detención.
Ahora no solo se habla de una embajada sino directamente de un intento de fuga, lo que hace que los magistrados consideren realmente apelar a la prisión preventiva mientras se desarrolla el juicio. La misma suerte correría para Eduardo Bolsonaro que, según Veja, podría ser detenido por obstrucción a la justicia.
