Axel Kicillof se quedó sin presupuesto luego de tortuosas discusiones sobre un fondo para municipios atado a la deuda que quería tomar el gobernador. Luego de dos cuartos intermedios, cuando la sesión amenazaba con naufragar, Kicillof envió a la Legislatura a Gabriel Katopodis para que trate de encarrilar la negociación que se le había ido de las manos a los ministros kicillofistas puros Pablo López y Agustina Vila.
Sin embargo, ya era demasiado tarde. En la oposición acusaron falta de diálogo e intransigencia del gobierno bonaerense. La irrupción de Katopodis no fue casual. la oposición le venía reclamando a Kicillof que pusiera como interlocutor a alguien con mas ruedo político como el ministro de Obras Públicas o al Cuervo Larroque, pero Kicillof eligió cerrar la negociación en dos de sus ministros más cercanos.
«Agustina es divina, pero no tiene decisión para bajar el martillo cuando hay que hacerlo», explicó a LPO uno de los líderes de la oposición, en referencia a la secretaria General, una de las funcionarias de mayor confianza de Kicillof.
«El gobernador ni siquiera nos dijo que no a nuestra propuesta, eso fue lo peor de todo. La falta de diálogo. Es una falta de respeto», dijo el jefe de bloque PRO, Matías Ranzini, en una conferencia de prensa furiosa que los líderes opositores dieron apenas se cayó la sesión.
La oposición le pide a Kicillof un 16% de la deuda que tome y se traba el Presupuesto
«Si no hay diálogo y búsqueda de consensos no vamos a llegar a ningún lado», agregó el titular del bloque radical Diego Garciarena.
En el oficialismo acusaron a la oposición de trabar la discusión con un reclamo «inviable» de girar a los municipios un 16% de la deuda que tome Kicillof en 2025.
Detallaron que además de un fondo de 160 mil millones, los radicales y el PRO pedían que un 16% del endeudamiento que tome el gobierno provincial vaya a los municipios, como anticipó en exclusiva LPO.
«La pretensión de sostener ese 16% sobre el desarrollo del endeudamiento con un mercado impredecible termina generando un endeudamiento mayor para el Ejecutivo», argumentó un colaborador del gobernador.
Pero hasta en el bloque peronista había bronca por lo que consideraban una postura demasiado inflexible de Kicillof. «Estaba para votarse un presupuesto 32 mil millones de dólares y 1500 millones de deuda y no cerró por una diferencia de 40 millones de dólares», afirmó a LPO un veterano
Como sea, ahora el gobernador tiene la oportunidad de aprovechar el verano para cerrar un acuerdo que le permita tener Presupuesto. La irrupción de Katopodis parece haber abierto esa ventana.
En la oposición reconocían que su irrupción «tardía pero buena». De hecho, en la conferencia de prensa, los jefes de los bloques de la UCR y el PRO confirmaron que ya acordaron una agenda de reuniones con negociadores del oficialismo para llegar a febrero-marzo en condiciones de sesionar «con el debate más ordenado».
Fuente: LaPoliticaOnline.com