Agustín Laje, el intelectual de ultraderecha mencionado como posible sucesor de Javier Milei, se ofendió porque nadie escuchaba su charla en Tucumán, en donde participó de un acto con el presidente.
Laje es uno de los Frankestein libertarios que teme Karina Milei y viajó junto a Milei a la provincia norteña para participar de una cena de la Fundación Federalismo y Libertad.
Pese a que hablaba ante un auditorio que fue a aplaudir al presidente, Laje no pudo seducir al auditorio con sus criticas al wokismo: quienes lo debían escuchar hablaban entre ellos o se trasladaban de un lado a otro del salón. La escucha activa que merece una clase magistral de ese calibre no se vio reflejada por esa actitud pendenciera de los asistentes, lo que fastidió al pensador.
El intelectual se dio cuenta de la incomodidad del momento cuando lo interrumpió la locutora. «Agustín, te pido dos minutos», dijo profesional de la voz. «Les pedimos a todos los presentes que hagan silencio, por favor. Para poder escuchar a Agustín Laje con atención», dijo la mujer. «Ahora sí, disculpá y seguí, gracias», mandoneó la locutora.
«Mirá, estoy casi terminando, de modo que quien aprovechó la charla, muchas gracias; y quien no la aprovechó, lo siento mucho por la mala educación», se quejó Laje, ofuscado.
Fuente: LaPoliticaOnline.com