Lula rompió el silencio y opinó sobre las cuestionada elecciones en Venezuela. El presidente brasileño se había llamado a silencio durante los dos días posteriores a la elección y su gobierno solo se había expresado a través de su enviado a Caracas y asesor en Política Exterior, Celso Amorim, y con un escueto comunicado de la Cancillería.
Ambos coinciden que lo que destrabará la crisis por las sospechas de fraude será la presentación de las actas que el chavismo no parece estar dispuesto a hacerlo.
En ese marco de crisis, Lula dijo que lo del domingo fue un proceso normal y tranquilo» y intentó calmar los ánimo al sostener que «es normal que haya una pelea», por las protestas de la oposición.
«Las personas que no están de acuerdo tengan derecho a expresarse y a probar por qué no están de acuerdo, así como el Gobierno tiene derecho a probar que tiene razón», agregó el presidente brasileño.
En otro tramo de su discurso, Lula instó al Consejo Nacional Electoral a que presente las actas para evitar las dudas y, en su defecto, acudir a la justicia. «Lo que sea resuelto entonces tendrá que ser acatado por la gente. Todos tenemos la obligación de reconocerlo», insistió.
Es evidente que el presidente de Brasil no quiere romper los puentes con Maduro y por eso evita una condena, pero en la medida que la situación empeore y se avancen en la detención de opositores, esta postura será cada más compleja de sostener.
Mas temprano, Lula conversó con Biden por teléfono en donde «coincidieron en la necesidad de que las autoridades electorales venezolanas divulguen de inmediato datos completos, transparentes y detallados de la votación a nivel de mesa electoral».
Lula advierte a Maduro que esperan los datos «desglosados» por mesa del escrutinio
Tanto EEUU con Brasil afirmaron que esta crisis «representa un momento crítico para la democracia en el hemisferio».
Por su parte, en un mensaje publicado en sus redes Biden dijo: «Hoy he hablado con el Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sobre una serie de cuestiones bilaterales y regionales, entre ellas la situación política que se vive en Venezuela tras las elecciones presidenciales».
La Casa Blanca también difundió un comunicado en el que remarca: «Estados Unidos ha estado siguiendo de cerca las elecciones presidenciales de Venezuela que tuvieron lugar el domingo 28 de julio y los anuncios posteriores del Consejo Nacional Electoral de Venezuela».
El texto continúa: «Seguimos pidiendo a las autoridades electorales de Venezuela que publiquen los resultados electorales completos, transparentes y detallados, incluidos los desglosados por colegios electorales. Esto es especialmente crítico dado que hay señales claras de que los resultados electorales anunciados por el Consejo Nacional Electoral de Venezuela no reflejan la voluntad del pueblo venezolano tal como se expresó en las urnas el 28 de julio».
«También estamos revisando otros datos electorales compartidos por organizaciones de la sociedad civil y los informes de observadores electorales internacionales», finalizó.
Fuente: LaPoliticaOnline.com