Aerolíneas Argentinas suspendió este lunes las negociaciones paritarias con los gremios aeronáuticos y se vuelve a agravar el conflicto que ya lleva varios meses de protestas que complicaron los vuelos.
La decisión de la empresa se da luego de que el gremio de los pilotos, que conduce Pablo Biró, puso en marcha medidas de fuerza indirectas que afectaron varios vuelos internacionales el fin de semana.
El gremio lleva a cabo paros en el Centro de Formación y Entrenamiento de Pilotos (Cefepra), lo que impide a los pilotos renovar sus licencias. Esto generó que varios aviones no pudieran despegar, por lo que hubo cancelaciones y los pasajeros fueron movidos a vuelos de otras compañías.
En ese marco, Aerolíneas le informó a la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), a la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), y a la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) que suspende las negociaciones salariales.
Las conversaciones se habían retomado la semana pasada en un encuentro con funcionarios de la Secretaría de Transporte y la Jefatura de Gabinete. También hubo reuniones técnicas y se agendaron encuentros para esta semana.
«Sin embargo, aún en este contexto de reapertura de mesas de trabajo, el gremio APLA tomó la decisión de provocar la cancelación de cuatro vuelos internacionales de largo alcance que estaban programados para este último fin de semana», señalaron desde Aerolíneas. «A pesar de contar con las herramientas para evitar estas cancelaciones, desde APLA hubo una manifiesta falta de interés y de voluntad en hacer que esos vuelos se operen», apuntaron.
Y sostuvieron que «esta provocación irresponsable de las autoridades de APLA demuestra que el conflicto salarial es una excusa para las autoridades del gremio -no así para sus afiliados- para dar una batalla política personal. Y en este acto, arrastraron la posibilidad de continuar cualquier tipo de intercambio con los otros gremios a pesar de su voluntad de continuar las conversaciones».
Desde APLA calificaron de «inaceptable» la suspensión y denunciaron que la empresa frenó durante dos meses las negociaciones salariales. «La empresa ha tenido tiempo más que suficiente para actuar y encontrar soluciones, pero optó por ignorar los reclamos, intensificando temerariamente la situación con mensajes que demonizan la profesión, viralizando recibos de sueldo falsos, enfatizando supuestos ‘privilegios’ y burlándose de las necesidades de quienes, día tras día, dan todo por los pasajeros», sostuvo el gremio de Biró en un comunicado.
Fuente: LaPoliticaOnline.com