En medio de una crisis sin precedentes de la industria autopartista a raíz del avance de las importaciones, en las últimas horas se conoció la decisión de la multinacional de capitales suecos SKF de cerrar su histórica fábrica de Tortuguitas para reconvertirse en importadora.
Operando en el país hace más de un siglo, SKF interrumpe la producción en una planta que funcionaba hace 90 años y se reconvertirá en importadora de piezas. Por esa decisión, fueron despedidos 150 trabajadores.
No se trata de un hecho aislado. La apertura indiscriminada de las importaciones promovida por Luis Caputo desbalanceó inmediatamente el intercambio comercial con Brasil en el materia de autopartes.
La cámara que agrupa a los fabricantes de autopartes, Afac, reveló que, durante los primeros ocho meses de 2025, la balanza comercial del sector autopartista con el vecino país registró un déficit de USD 6.085 millones, una suba del 6,7% respecto del mismo período de 2024.
«Tras evaluar exhaustivamente diversas alternativas, lamentablemente no hemos encontrado una alternativa viable al cierre de la planta de Tortuguitas», señaló SKF en un comunicado desde su sede en Estocolmo.
Enmarcada en esta crisis, la planta de autopartes de camiones Scania en Colombres, Tucumán, sigue desacelerando su producción, lo que generó las alertas del gobernador Osvaldo Jaldo.
«En los cuarenta años que lleva, nunca escuché que Scania haya tenido problemas. Hoy, para veinte días su producción cada uno o dos meses y para que una empresa internacional de la magnitud de Scania tenga esta consecuencia no es un semáforo amarillo, ya es un semáforo rojo y tenemos que estar muy atentos», dijo Jaldo.
En tanto, en la Asociación de Industriales Metalúrgicos (ADIMRA) alertaron sobre el estancamiento de la industria local, con niveles porductivos muy bajos a raíz de porcentajes de importaciones récord.
Según esa entidad, la producción cayó 5,2% interanual en septiembre, tocando su nivel más bajo de capacidad instalada en los últimos cinco años. El epicentro de esa crisis se registra en las provincias de Córdoba y Buenos Aires.
Tras el cierre de Nissan, ahora Scania suspende la producción de su planta de Tucumán
«Lo que se exporta como un vehículo del Mercosur es, en un número creciente de casos, un Frankenstein automotriz con un corazón asiático y con un futuro principalmente chino», alertó la Afac.



